Un pensador llamado Bruce Lee
Todos conocemos la faceta de luchador de Bruce Lee. Pero pocos saben que era una persona profundamente interesada en la lectura y el conocimiento, y que gran parte de su éxito se debió a su poderosa mente.
Muchas de sus hazañas no fueron solo consecuencia de su compromiso con el entrenamiento de su cuerpo. Fue la capacidad de cultivar su mente la que lo llevó a alcanzar la mayoría de sus logros.
Y es de su mente, de su forma de pensar y ver el mundo de lo que quiero hablar aquí.
Tras saltar a la fama, mucha gente quiso etiquetar a Bruce Lee. Unos como americano. Otros como chino. Pero él se negaba a admitir las etiquetas. Porque las etiquetas suponen una visión limitada del mundo, y Bruce Lee valoraba todo lo contrario. Una visión amplia.
En una ocasión, durante una entrevista en televisión en Hong Kong, le preguntaron cómo se veía realmente a sí mismo, si como chino o como americano.
Bruce Lee, con su característica templanza, miró al periodista y le respondió con calma:
"No me identifico con ninguno. Me considero un ser humano ".
Bruce Lee guió su vida bajo tres premisas básicas. Además del legado que como atleta dejó al mundo, hay mucho que aprender de su filosofía de vida. Repasemos cuáles eran estas tres premisas.
Ningún dogma contiene todas las respuestas
Sea cual sea la parte del mundo en la que vivas, te mueves por un conjunto de costumbres y creencias sobre lo que es correcto y lo que no lo es.
Desde que naciste has estado expuesto a un marco cultural o ideológico concreto, y lo más probable es que gran parte de tus patrones de pensamiento estén influenciados por esos valores.
Pero todo lo que tu entiendes como bueno o correcto no tiene por qué coincidir con lo que piensan otras personas en otros lugares. Cada cultura tienen creencias diferentes sobre lo que es correcto y lo que no, lo que es digno de respeto, lo verdadero y lo falso.En ocasiones son sólo diferencias sutiles, y otras veces son visiones radicalmente opuestas.
Bruce Lee estuvo muy influenciado por la filosofía china, pero siempre buscó mezclar y combinar diferentes ideas para llegar a sus propias conclusiones personales. Siempre fue consciente de las limitaciones de exponerse a la visión de una sola tradición o cultura.
La mayoría de las veces, la razón por la que la mayoría de las personas apoyan un dogma, una forma concreta de pensar y entender el mundo, no es porque estén convencidas de ello, sino por la pura casualidad de haber nacido en un lugar concreto.
Casi todos pensamos del modo en que lo hacemos porque al nacer en un determinado lugar, el sistema de creencias predominante en el entorno impregnó nuestras vidas.
Por eso hay que ser prudentes en relación a lo que interpretamos como cierto. Cada cultura o ideología tiene algo que enseñar, y puede ofrecer respuesta a muchas preguntas, pero ninguna tiene la respuesta a todas.
Para Bruce Lee, de todas y cada una hay algo que aprender, pero también debemos cuestionarlas. Es decir, debemos tener la mente lo bastante abierta como para aceptar otros planteamientos, y a la vez tener el suficiente espíritu crítico para poner en cuestión las verdades absolutas de nuestro sistema de creencias.
Desarrolla una verdadera confianza intelectual
Muchos de los marcos de pensamiento existentes han sobrevivido al paso del tiempo. Por lo general asumimos que si una idea ha existido a lo largo de la historia, hay una buena razón para que así sea.
Por eso, refutar una parte de un dogma existente no resulta fácil. Para hacerlo se necesita una fuerte confianza intelectual .Confiar en que tienes una buena razón para rechazar o aceptar una idea.
Bruce Lee creía que incluso la confianza que tenía en sus habilidades físicas era fruto de la confianza intelectual que construyó en su mente. Esa confianza era la que le permitía hacerse preguntas, pero también innovar creando nuevos estilos de combate.
Un pensamiento y una capacidad de análisis independientes requieren agudizar la mente, hasta el punto de ser capaz de obtener razones para confiar en tus propios criterios y obviar las ideas y valores que han sobrevivido a lo largo de la historia.
Esa mente independiente es la que nos va a ayudar a distinguir cuáles de esos valores que han superado la prueba del tiempo son correctos, y cuáles son erróneos.
Elige la autoexpresión por encima de la imitación
Bruce Lee sentía que la comunidad de artes marciales de Hong Kong, estaba demasiado preocupada por escoger y seguir determinadas tendencias de acción en lugar de con la autoexpresión.
En su opinión, lo primero es conocerse uno mismo, y a partir de ahí juzgar lo que es relevante para ti de otros modelos
En palabras del propio Lee: "Aprender no consiste en una mera imitación o en la capacidad de acumular una serie de conocimientos fijos. El aprendizaje es un proceso constante de descubrimiento que nunca termina "
Vale la pena desarrollar una mentalidad de aprendizaje continuo pero las lecciones deben ajustarse a tu propia expresión, en lugar de que sean estas la que te moldeen a ti.
La base del progreso comienza por saber quién eres y lo que sabes que es verdad. Con esa base sólida de confianza intelectual, tu objetivo debe ser repetir y mejorar, pero no renunciar a ser tú mismo para intentar convertirte en alguien que no eres.
La idea principal que cabe extraer de esta reflexión es que merece la pena mantener cierta distancia de cualquier fuente de conocimiento, y no establecer vínculos emocionales.
No hay que enamorarse de una idea. Ni adorar a un maestro. Aprender no es un acto de copiar.
Las lecciones externas que puedas aprender sólo deben servirte para aumentar la expresión de ti mismo.