Buen inicio de semana para todos!
Hace cuatro días, ya estaba pensando como iba a ser mi próximo post.
Pero nunca me imagine que lo cambiaría por este.
Es un horror cuando ocurre un accidente o alguna emergencia en nuestras casas.
Esta vez me toco a mi: Mi hija.
El viernes, después de llegar del preescolar, mi niña comenzó a vomitar todo lo que comía o tomaba, incluso agua.
La llevamos a un dr. Y le recetó medicamentos tomado, como no presentaba ningún otro síntoma, solo el vomito. Le recetó antibiótico y un medicamento para cortar el vomito.
Como era de esperarse, al no concentir nada en el estómago, vomitaba la medicina. Así que fuimos de regreso con el dr.
Le recetó casi lo mismo pero vía intramuscular (inyección)
Les contaré que... Mi hija nunca había en su corta vida había enfermado tan grave como para necesitar inyecciones o intravenosa.
Pues ya, le tocó a mi tia inyectarla y bueno... Un show para hacerlo, se movió, grito como nunca, yo me sentía muy mal pero tenia que hacer mi parte y agarrarla fuerte para que no se fuera a lastimar con la aguja.
Al final de todo, el medicamento no hizo efecto, ella siguió vomitando 2 veces más.
La vi tan desanimada y ojerosa por la deshidratacion que mejor no quise ir más con ese dr. Y la lleve enseguida al hospital.
Le tuvieron que poner medicamento por intravenosa, otro martirio para mi nena, pero era necesario. Después de casi 3 horas (desde 12:30 am hasta 3:40 am) por fin cesó el vomito.
Tomando mucho suero y tratando de dormir, por fin la dieron de alta.
Llegamos a casa, yo aún con el miedo de que fuera a vomitar de nuevo, llegamos a casa a las 4:00 am, me desperté a las 7:00 am porque los sábados, como saben, fue día de escuela para mi.
Al despertar, noté que mi niña estaba un poco irritada (aquí así le decimos a la febricula 37° a 37.5°
No podía faltar, ya que mi examen es la próxima semana y necesitaba esa clase para aprender lo más posible.
Le di una dosis de ibuprofeno y la deje en las mejores manos, mi tia.
Llegue a la hora del almuerzo que nos permiten salir un rato de clase, y me dio gusto ver a mi princesa comiendo y un poco más tranquila, pero cuando regrese al salir de clases, tenía fiebre de nuevo, había subido y se durmio yo pienso de la irritación por la fiebre, tuve que llevarla al hospital de nuevo.
Entonces me pusieron a quitarle la ropa, le administraron paracetamol, le pusieron gasas húmedas y me dijeron que le echará aire (Ya que tenía 38.5 De temperatura y no querían meterla en hielo).
Lamentablemente tuvieron que volverla a canalizar y sacarle sangre para análisis, también de orina.
Estuvimos esperando ahí los resultados, y cuando me los entregaron, apareció el diagnóstico:
*Infección de orina, que se estaba pasando a los riñones *
Le recetaron antibiótico y un medicamento para limpiar riñones y vejiga.
Salimos del hospital unas cuatro horas después. (De la 1:00 pm a las 5:30 pm)
Estuvo aún decaída el domingo, pero hoy lunes ya esta activa como antes, definitivamente prefiero verla activa y corriendo por todos lados que verla enfermito y sin gamas ni de jugar.
Gracias a los doctores y a Dios que todo fue para bien.
Jamás había tenido una experiencia de tanto miedo y estrés como esta.
Y como bien dicen: No valoramos a nuestros padres hasta que tenemos hijos
Entendemos el porque los regaños, castigos, incesantes llamadas y sus preocupaciones, hasta que tenemos hijos sabemos lo mucho que le dolemos a nuestros padres.
Muy buen post, me gusto mucho espero seguirte leyendo pronto
Que bueno que todo salio bien la verdad es algo para lo uno como padre nunca va a estar preparado lo bueno es que esta todo bien
Si, la verdad fue duro, una experiencia bastante fuerte. ¡Pero agradezco que ella esté bien!