Fácil entrar, Fácil Salir.
<p dir="auto"><center>“si no te llama, es porque no quiere llamarte. Si te trata como si le importaras una mierda, es porque le importas una mierda. Si te traiciona, es porque no le gustas bastante. No existen personas asustadas, confundidas, desilusionadas, no existen personas trágicas afectadas por experiencias pasadas, necesitadas de ayuda, necesitadas de tiempo. Las personas se dividen en dos categorías: las que te quieren y las que no.” <div class="text-justify">Al leer esto, me vi señalada, como si ese dialogo sacado de un famoso MEME de internet supiera describir mejor que yo como debía pensar. Para variar, comencé a dudar con respecto a mis creencias, las preguntas ¿soy en extremo comprensiva con él? ¿Soy yo quien mantiene esto a flote? Y la mortal pregunta ¿es verdad que no le importó? Fui sintiendo como todas estas dudas entraron en mi cabeza, mientras mi cara iba mirando al piso y mi tronco encorvado, comenzaba a sentir a la altura de mi pecho un punzante dolor, mi mente llena de preguntas, para las cuales mi boca tenía las respuestas pero que mis oídos no querían escuchar, comenzó a saturarse y lo que es peor, a mantenerse en ese estado por un largo rato. <h1> <p dir="auto">La solución, en mi mente, era recibir ese mensaje o esa llamada “salvadora” donde un simple, Hola, como estas, derribara todo ese mundo hipotético creado hace pocos minutos. Ese como estas, sin reglas ortográficas, era para mí la clara señal enviada por el cosmos para demostrarme que todo lo pensado era un error. Pero eso no ocurrió, en muchas ocasiones mi teléfono no hizo ni chui, y era yo quien terminaba escribiendo el típico, Hola, como estas? Con la esperanza de recibir una respuesta como: Esperando que aparezcas en mi vida para sentirme completo, pero créame que a lo sumo obtenía un: bien y tú? 7 minutos más tarde, que no calmaba mi desilusión y aumentaba mi ansiedad. <p dir="auto">Ahora después de un proceso, que llamaría de “sanación”, comencé a pensar en otra interrogante, y es ¿Cómo llegamos las mujeres a sentirnos tan mal por un “simple” meme? ¿Cómo llegamos hasta tal nivel de señalamiento? ¿En qué punto nos perdemos y nos convertimos en marionetas de nuestras malas acciones? Me tomo muchas reflexiones llegar a las que creó las respuestas correctas, donde primero es necesario hacer una retrospectiva, observar el curso cronológico de como, yo particularmente, llegue a ese momento, donde sentía que cualquier cosa externa definía mi vida y estoy segura que más de una chica se sentirá identificada. <blockquote> <p dir="auto">Para mí, todo tiene origen en el autoestima, cuando uno la tiene golpeada, por no decir casi muerta, es muy fácil caer en situaciones que no solo lastiman el corazón si no tu integridad, pero como saber que tu autoestima esta lastimada? Como saber que existe si quiera? ¿Cuál es su definición? No existe un único enunciado, pero sí todos coinciden que se refiere a la estimación a sí mismo, a mi entender es darte cuenta que te está afectando y ser capaz, ojo no quiere decir sin dolor, de alejarte de esa situación. Está relacionado con tener conciencia de sí mismo, saber cuáles son tus fortalezas, pero sobre todo tus debilidades, para aprender a controlarlas y no que en momentos de desespero ellas te controlen a ti, porque si hay algo seguro en esta vida es que nos vamos a encontrar con muchos momentos donde nuestra entereza siente más que un desmayo y puede caer al piso. <p dir="auto">Y normalmente estos desvanecimientos morales suceden cuando estamos enamorados, y si encontramos el martillo perfecto para este clavo, de seguro nos estaremos enfrentando a más de un momento de desesperación en nuestras vidas, donde controlarnos nos resulta inmensamente difícil, por eso aprender cuales son los flancos débiles resulta imprescindible, con eso aprenderemos que lado de nosotras se debilita, con cual palabra, con que gesto, con que sonrisa, en cual rechazo. <p dir="auto"><code>Mariangel Arrieta