Las ganas no nos las quitan, se desvanecen a la par de nuestras ilusiones cuando dejamos de regarlas o permitimos que la decepción las marchiten.
Recibir mas restas que sumas, o poner el foco en las primeras, puede llevarnos a una invasión de sensaciones desagradables y en consecuencia, a dejar de hacer progresivamente cosas que nos gustan, perdiendo así fuente de placer en nuestro dia a dia, Perdiendo las ganas.
Cuando tenemos ganas todo fluye mejor pero cuando no, no puedes esperar a que regresen por sí solas, pues no se han ido, se han dormido por falta de acción y por dejar a un lado la ilusión.
Oblígate a hacer eso que te gusta, hasta que las ganas se apoderen de ti y dejen de ser una obligación.
Vamos hazlo, atrévete para que se despierten tus ganas...
Feliz Dia!!