Un cordial saludo a mis queridos lectores activos de Steemit.com que siempre leen los contenidos que publico en mi blog. He estado un poco alejado de la publicación de artículos en esta gran red social debido a ocupaciones personales y profesionales que para ser honesto han consumido bastante de mi tiempo. Sin embargo, acá estoy de nuevo y esta vez he venido a hablarles sobre algunos temas en cuanto a la compra de joyería; una mercancía codiciada cuya comercialización debe realizarse con bastante perspicacia ya que el engaño entre vendedores y compradores es una práctica muy común durante los negocios.

Cuando un comprador asiste a una joyería no debe presumir de su conocimiento sobre la originalidad de piedras preciosas como oro y diamantes, más bien éste debe expresarse con bastante humildad, por supuesto sin llegar a demostrar un total desconocimiento sobre el manejo comercial de las joyas, porque este tipo de actitud no es recomendable adoptarla cuando se realizan negocios ni otro tipo de actividad; al momento de hacer un negocio o comercializar todas las partes involucradas deben adoptar una conducta sólida en cuanto a comunicación verbal y coporal. En otras palabras, cuando el comprador posee un amplio conocimiento sobre piedras preciosas y se dirige a una joyería para adquirirlas es preferible que no demuestre a grandes rasgos su perspicacia sobre el tema.

Cuando se visita por primera vez una joyería el objetivo principal no debería ser realizar una compra sino más bien realizar una observación ampliada a todas las piedras preciosas que en esa tienda puedan adquirirse. Es como realizar una inspección visual de las joyas que puedan ser adquiridas, además de estudiar la forma de comercialización del vendedor encargado, y de esta manera verificar si éste es un experto de la joyería como mucho aparentan muy bien serlo. De hecho, en la primera visita que se hace a una joyería el comprador debe interesarse por unas cuantas joyas que contengan rubíes o zafiros, piedras valoradas en altos precios y modificadas químicamente para alterar su composición original, y esto para fomentar el crecimiento de las estafas, al vender piedras preciosas falsas. Una buena técnica para verificar la experticia del joyero consiste en cuestionarlo sobre el proceso de obtención de la piedra preciosa, redactar todas las fases del proceso en un block de notas e informar al joyero que se optará por la revisión de un experto externo en piedras preciosas. Esta acción demostrará al vendedor que está en frente de un comprador con buenos conocimientos en joyas, y que además busca asesoría profesional y externa antes de realizar sus compras, todo esto con la finalidad de no ser estafado. Se muestra solidez al vendedor.

Es bastante común encontrarse con piedras preciosas coloreadas que no son naturales, sino que fueron sometidas a tratamientos químicos para aparentar con belleza una originalidad totalmente falsa. Es por ello que después de múltiples relatos e investigaciones utilizando prácticas antiguas para el reconocimiento de joyería auténtica se ha llegado a la conclusión de que la mayoría de las piedras coloreadas deben su aparente belleza a tratamientos químicos, lo cual indica que al adquirir piedras preciosas coloreadas se corre un gran riesgo en tener en las manos joyas sin una verdadera autenticidad.

Un buen comprador deber garantizar la prudencia en cuanto al buen uso de una lupa de aumento para joyeros, pues su uso indebido puede generar situaciones no muy cómodas durante la comercialización de piedras preciosas. Si bien una lupa de aumento para joyeros es una herramienta útil para tener una visión más profunda de los materiales con los que están hecha la joyas, pues cualquier persona que posea amplios conocimientos en esta rama puede tener una y utilizarla al momento de adquirir una piedra preciosa, pues con esta herramienta podrá verificar mediante una inspección visual la autenticidad de las piedras preciosas. Sin embargo, cuando un comprador conocedor se encuentras realizando una compra es preferible que este opte por otros métodos previos de inspección y deje el uso de la lupa como una inspección final antes de la compra, pues en primer lugar así expresa experiencia y dominio en cuanto a compras de joyas auténticas y además de ello, en esta etapa de la compra el vendedor debe entender con qué tipo de comprador está tratando y de esta manera sincerarse en ambas partes y vender un producto auténtico en cuanto a originalidad natural.