Hola steemits, les traigo este post pues a muchas personas se les olvida comer porque se distraen, ya sea con el trabajo, los estudios u otras cosas. Entre esas personas estoy yo.
¿Qué pasa si se nos olvida comer?
Perdernos una comida, nos puede ocasionar muy malos momentos, debido a que provoca varias alteraciones en el organismo al hacerse frecuente en nuestro día a día. Si nos preguntamos ¿quién es el que sufre? No hay otro que nuestro cuerpo. Por eso no basta con comer sano, también hay que respetar los horarios para hacerlo.
Cuando no comemos a la hora acostumbrada, el estómago segrega sustancias que alteran su normal funcionamiento y aumenta el movimiento intestinal que, a la vez, causan inflamación y dolor, de ahí nos provienen los dolores de estómago. Dichos dolores no son más que molestias en la zona superior del abdomen, dando orientación no solo del estómago sino también de órganos y vísceras del aparato digestivo. Respetar los horarios de comida es de vital importancia para nuestro bienestar.
Los síntomas más comunes que pueden presentarse son:
Dolor abdominal.
Náuseas y eructos.
Intolerancia a los alimentos.
Dolor tipo cólico intenso, flatulencia.
Diarrea y/o vómitos.
Pesadez después de ingerir la comida.
Consecuencias
Al hacerse frecuente este olvido, vienen consecuencias de carácter delicado como:
Gastritis: Es una inflamación de la mucosa del estómago que provoca inflamación y problemas para digerir, siendo su causa principal la ingesta de las comidas sin horario.
Trastornos metabólicos: Estos pueden ser verificados en el peso de la persona, ya sea provocando pérdida o ganancia de peso.
Ulceras.
Deficiencias de vitaminas.
Estreñimiento.
Cáncer.
¿Cómo evitarlo?
Si, por alguna razón, no podemos comer a la hora que estamos acostumbrados, debemos por lo menos ingerir algún bocadillo y beber agua. Sin embargo, lo adecuado es comer cada tres horas, esto se logra consumiendo las comidas principales y meriendas a media mañana y a media tarde, así nuestro cuerpo tendrá la energía necesaria para realizar cualquier actividad.
Todo esto nos lleva a reflexionar sobre la importancia de los cambios de horarios de comida a los que sometemos a nuestro organismo sin reparar en los daños posteriores que ello puede ocasionar. Así que el «se me olvidó comer» no es una excusa suficiente para pasar dolores.