Después de más de dos años que salieron de su país de origen han tomado la decision de emprender una nueva aventura.

A medida que se acercaban los días de su viaje se iban llenando de miedo, pero no del miedo que paraliza, sentían ese sustico por lo desconocido, surgían dudas de cómo sería el cambio.

Pero si algo tenían claro es que todo iba a estar mejor, lo único que necesitaban era estar unidos como familia, y eso lo estaban.

Sentían en sus corazones que todo iba a estar bien y que no tenían nada que temer

Sabían que iban de la mano de Dios, habían sentido en cada situación que a pesar de poder haber sido adversa ellos la habían aprovechado para saber que iban por el camino correcto. A pesar de las complicaciones salieron victoriosos, porque nunca dudaron que eran parte del mismo proceso, y que cualquier cambio de última hora era lo preciso que tenía que ocurrir.

Se enfrentarán a un nuevo pais, y con eso con nuevos retos, nuevas personas, nueva cultura.

Conocerán más sitios, podrán tomar más fotos y contar más historias.

Pero por sobre todas las cosas tienen su fe puesta en que