A diario pasamos la mayor parte de nuestro tiempo en nuestro trabajo, lo que convierte este sitio en nuestra segunda casa. Las relaciones laborales o interpersonales en nuestro espacio de trabajo se deben manejar de la mejor forma posible para evitar malos entendidos que puedan volver nuestro rutina diaria más pesada y es que cuando hacemos lo que nos gusta y nos acostumbramos a hacer nuestras labores de forma rutinaria ya el peso del trabajo se inclina más al ambiente laboral.
No se tomen las cosas de manera personal
Los malos entendidos ocurren cuando las personas están predispuestas al conflicto ya que se encuentran siempre a la defensiva creyendo que cualquier acción o corrección que le realicen a nuestro trabajo es sinónimo de que le caemos mal a esa otra persona, sin saber que estas pueden ser simplemente un consejo que podemos aprovechar dependiendo de la actitud que tomemos.
Escucha bien antes de hablar
Las habladurías de pasillos, chismes y rumores que se riegan en nuestro ambiente laboral es algo que podemos notar desde el momento que llegamos a nuestro trabajo, no involucrarse en estas situaciones suele ser beneficioso para nosotros en muchos casos, ya que con este tipo de rumores o chismes podemos quedar tildados como personas conflictivas y por lo cual no nos tomarían en cuenta para futuros cargos. También al momento de resolver este tipo de situaciones hay que escuchar y entender bien lo ocurrido para poder dar con una solución que le ponga fin a esa situación dejando una postura firme y madura ante esos problemas.Hablar claro directo
Hablar de manera clara y directa con la o las personas involucradas en situaciones que pueden ser resueltas en un principio, puede ser clave para evitar malos entendidos y que un conflicto pueda volverse más grave terminando en motivo de despido para algunos o volviendo el ambiente laboral tenso y muy desagradable; Recordemos que es nuestra segunda casa y pensar que iremos a ese lugar sabiendo que situaciones incomodas nos esperan suele ser de por sí agotador y tedioso.
Modula de forma correcta lo que dices
En ocasiones los conflictos se dan no por lo que decimos sino el cómo las decimos, la modulación es muy importante al momento de hablar ya que puede cambiar por completo el mensaje que queremos hacer llegar haciéndolo pasar de una sugerencia a una imposición en muchos casos y estos pueden ser vistos de forma negativa también elegir las palabras correctas al momento de afrontar una situación de conflicto puede ser importante para que este sea solucionado de forma correcta.
No te unas al problema, únete a la solución
Hablar y hablar sobre el problema no resolverá nada y en algunas cosas puede avivar mas la situación, si hay que hablar referente a esa situación hay que hacerlo para plantear soluciones concretas que sirvan de ayuda en la resolución del conflicto ya que dependerá en gran parte de nuestra madures y actitud que tomemos ante la situación. No hay que esperar que otras personas intervengan para darle fin a esa situacion. Recuerden que estamos hablando del sitio donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo bien sea nuestro empleo o casa de estudios.
Recuerda.
Recuerda también rodearte de personas que aporten algo positivo en tu crecimiento laboral o personal, que apoyen con comentarios o criticas constructivas tu trabajo, ya que personas con actitud negativa solo te sumergirán en sus problemas y crearan discordia a tu alrededor afectando tu entorno emocional o laboral de forma negativa.