Este post es para aquellos que amamos la lectura y una vez empezamos con un texto ya no podemos parar, sin embargo no todo es miel sobre hojuelas, leer sin las condiciones óptimas puede traer consecuencia en nuestra vista, la cervical o también puede que tengamos “malos hábitos” al leer, mi idea al crear este texto es que la lectura sea completamente satisfactoria y poco a poco aumentemos los pros y eliminemos los contras.
No escuchar música
Un error común es poner música al leer, ya sea a bajo volumen o algo instrumental, pero es un error garrafal ya que nuestro subconsciente analiza los sonidos mientras tú conscientemente estas interpretando la lectura, como resultado deterioras la comprensión de la lectura, según el Dr. Nick Perham en el año 2010 realizó un estudio en donde demuestra que la música puede afectar la memoria a corto plazo, y lo más probable es que cada cierto periodo de tiempo tengas que releer una línea.
Y aunque si podrás hacer las dos cosas al mismo tiempo no te concentrarás de la misma manera a que si lo hicieras en silencio.
Estar en un lugar con mucha gente
La mayoría de las veces, cuando comenzamos o continuamos con una lectura estamos en lugares con mucha gente, pues aprovechamos cualquier sitio que encontremos para poder leer, ya sea en el autobús, el metro, un parque, etc.; sin embargo, al estar rodeado de bastante gente se producirá ruido, y esto ocasionará que te distraigas y no retengas de forma acorde la información de la lectura.
Por lo que te pondrás en “modo automático” y tu reacción será sólo leer de corrido, sin poder comprender de lo que
trata la lectura.
No buscar las palabras desconocidas
Una de las maravillas de la lectura es que se puede ampliar el vocabulario, y cuando estamos leyendo regularmente aparecen palabras que no conocemos, pues no somos diccionarios andantes. De modo que si no conoces una palabra, búscala en Internet o en algún diccionario. Pues es horrible continuar con la lectura sin saber qué significa alguna expresión o concepto.
Un consejo, cuando leo en casa tengo una libreta al lado de mi escritorio donde anoto rápidamente las palabras inusuales, también lo aplico para lugares, personas que no explican su procedencia en los libros y alguna referencia de un libro (es un ciclo sin fin).
Evita posturas cómodas
Normalmente, pensamos que cuando vamos a leer necesitamos estar lo más cómodos posibles y más si se trata de una lectura larga. Y pensamos en prepararnos una taza de café o té, recostarnos en nuestra cama o en algún sillón, para tener una postura a gusto. También solemos adoptar posturas extrañas e inusuales para combatir el dolor corporal.
Aunque ¡esto es una idea errónea!, lo idóneo es estar en una postura recta, porque de esta manera el cerebro recibirá un mayor flujo de sangre y oxígeno, y tus ojos se focalizarán mejor en la lectura. En cambio, si estás muy relajado, tu cerebro estará igual, y lo único que tendrás será una lectura pero en tus sueños.
Si te cansas de esta posición, probablemente tu cuerpo te esté diciendo que es hora de tomarse un respiro, asómate a la ventana, da una vuelta por la casa o prepárate un bocadillo y ¡analiza lo que acabas de leer!
No leas con luz insuficiente
Leer o tratar de memorizar contenido con una luz pobre y escasa, lo único que logras es forzar a tus ojos causando fatiga ocular. Es algo muy sencillo que normalmente se puede preparar justo antes de empezar la sesión, busca un lugar bien iluminado, con luz natural a ser posible.
Al lado de una ventana sería ideal si es de día, o tener iluminación artificial que te aporte una buena cantidad de luz dirigida hacia el texto para que tus ojos no tengan que hacer esfuerzos de más.
No muevas la cabeza
Es común que mientras leemos movamos la cabeza de derecha a izquierda, y creemos que esto es normal. Esto no sólo ralentiza el proceso de lectura ya que también al estar moviendo tu cuerpo provocarás poca concentración, pues perderás de vista el texto, y por consiguiente el ritmo que tenías en la lectura. Por eso, es recomendable que cuando estés leyendo el único movimiento que debes hacer es el de tus ojos.
No trates de adivinar y evita el silabeo
A veces, cuando lees tus ojos captan una fracción de la palabra y automáticamente deducen por el contexto y la longitud qué palabra es, a este error se le llama adivinación y causa que tengas que volver sobre lo que ya has leído cuando la frase empieza a perder significado porque has adivinado mal, una mala interpretación te hace perder tiempo y concentración, haciendo que caigas a su vez en la re-lectura.
La adivinación puede deberse fácilmente al silabeo, donde el problema es que el lector interpreta la primera sílaba de la palabra, se detiene, lee la segunda, se detiene a comprenderla, y así sucesivamente hasta completarla. Sí, como ya habrás adivinado se debe a la segmentación de los símbolos.
En este caso, el lector no percibe la palabra como un conjunto sino la unión de mucho “pequeños” significados, además, esto deriva en pérdida de concentración ya que el cerebro no recibe la suficiente información por minuto como para mantenerse ocupado.
No muevas la lengua o los labios
Este gesto que hacemos con tanta frecuencia es una reminiscencia de cómo nos enseñan a leer en voz alta cuando somos pequeños, aunque más tarde dejemos de hacerlo, seguramente te haya quedado la tendencia a mover los labios y la lengua como si estuvieses pronunciando el texto en voz alta.
Algo tan sencillo como esto está ralentizando tu velocidad de lectura de forma crucial, date cuenta de que un lector ágil es capaz de captar y retener información de un solo vistazo mientras que al mover la boca lo que hace es disminuir la velocidad con la que es capaz de leer el texto. No te preocupes, ahora que eres consciente de este problema seguro que te será mucho más fácil evitarlo y concentrarte.
No cuidar tu vista
Es un hecho que muchas personas que no tienen la vista se vean perjudicados a la hora de leer, los oftalmólogos siempre recomiendan tener lentes a la hora de leer, no solo libros, revistas o periódicos sino también al uso de la computadora, como consecuencia estas personas que nunca necesitaron lentes correctivos terminan yendo al doctor por dolores de cabeza, dolores oculares y en el peor de los casos deterioro de la vista.
Así que, si has sentido estos síntomas o quieres prevenir cuanto antes acude al médico y cómprate una montura para leer o incluso para trabajar en steemit.
No leer en movimiento
Muchos de nosotros al tener un viaje largo lo primero que hacemos es tomar un libro o comprar el periódico para distraernos, pero algunos medios de transporte como por ejemplo tu carro particular, los autobuses incluso algunas embarcaciones, están en constante movimiento ya sea por curvas, obstáculos en la vía y deterioro de las carreteras hacen que nuestra vista busque la continuidad del texto que leemos cuando el bus cae en un bache o pasamos un policía acostado.
Espero que este post te ayude a mejorar la fluidez de tu lectura y no tengas ningún tipo de consecuencia a largo plazo, además, es recomendable que encuentres la distancia óptima de lectura para ti, ni muy cerca ni muy lejos, como imaginarás.
Si pase algo por alto o deseas dar tu opinión ¡no lo dudes y comenta!