Todo comienza porque un día leí que las plantas de romero son ideales para aromatizar los hogares. Sentí la inquietud y me dije "Si esto es cierto, necesito una". Vivo cerca de la playa, por lo que mi apto siempre es un tanto húmedo y ese olor nadie lo percibe pero yo sí.
Un día, luego de tanto pensarlo, paré en un vivero y bueno, no había romero pero salí con 5 plantas, 2 bolsas de tierra y muchas expectativas. Desde ese entonces, comencé a pensar en un espacio que tengo detrás de mi apartamento (vivo en Planta baja) que puede convertirse en un lugar ideal para cultivar plantas para mi consumo y por qué no, hasta para alimentar el alma; estoy investigando y aprendiendo sobre horticultura y a partir de hoy voy a contarles paso a paso, con tropiezos y todo, el progreso de mi huerto... A ver hasta dónde llegamos.
¡Deséenme éxito!