Esta fue una pregunta que me hice mientras me sacudía la mano de dolor tras golpearla contra el escritorio. Todos nos hemos enfadado alguna vez por un videojuego. Ya sea por la mecánica del juego, los fallos o porque el tipo que te acaba de matar era un hacker. Pero mientras me arrepentía de mi acción anterior, intenté recordar la última vez que un juego me había hecho enfadar, y no se me ocurrió nada.

Así que déjenme explicarles por qué me enfureció. Es muy raro que me enfade con un juego al que le hago una reprimenda. Me parecen actos bastante infantiles. Pero de vez en cuando no puedo evitarlo. No me enfurezco por mecánicas justas ni porque me haya matado otro jugador; lo que me enfurece son los fallos, un diseño de niveles pésimo y cosas que crean una experiencia injusta para el jugador. Y esto me causó el dolor de mano.
Estaba jugando el nivel "Vida" de Black Ops 3. En una parte del nivel aparecen un número infinito de enemigos mientras tu tarea es llegar a un control de puerta y entrar al edificio a toda prisa para ponerte a salvo. El problema es que, incluso si te encargas de los enemigos más grandes, aparecen más de inmediato. Unas diez veces eliminé a los grandullones, corriendo hacia el control de puerta, abriéndolo, corriendo adentro con la esperanza de encontrar un punto de control, solo para morir sin llegar a ninguno por un disparo en la espalda.

La última vez que esto pasó, me golpeé la mano contra el escritorio, y bueno, por eso me dolía. Por mucho que me enfade, nunca destruyo nada porque hacerlo es una tontería y puede salir caro. Así que me tomé un respiro del juego y lo volví a iniciar para darme cuenta de que, al parecer, había llegado a un punto de control, ya que aparecía dentro del edificio.
Quizás los dioses de los videojuegos se apiadaron de mí, o quizás muchos COD para PC tienen fallos. Por mi experiencia, es esto último. Mi última muerte ni siquiera fue la más lejos que llegué dentro del edificio.

Pero la pregunta seguía conmigo: ¿cuándo fue la última vez que me enfurecí? Bueno, por fin tengo la respuesta, y es con Kingdom Come: Deliverance. La función de guardado del juego puede ser un poco dudosa, ya que necesitas crear una poción específica para poder guardar la partida.
Solía ​​llevar un buen suministro del llamado Schnapps del Salvador. Y confiaba bastante en mis habilidades como para no tener que salvar a la escoria. Pero entonces salió un DLC para el juego que compré, que añadía perros. Nunca pensé que también añadiría perros enemigos. Estos cabrones te agarrarán las piernas mientras los enemigos te machacan. No sería ni la mitad de malo si pudieras golpear a estos perros, pero la mayoría de las veces son demasiado rápidos.

Muchas veces, jugando a Kingdom Come: Deliverance, me convertí en víctima de estas plagas. Veía un campamento y pensaba: "Los voy a matar a todos", solo para empezar el ataque y oír los ladridos de un perro que me atacaba directamente. Moría y luego me daba cuenta de que había hecho un montón de contenido secundario sin guardar, lo que significaba que me retrasaba unas horas.
Al principio pensé que quizá era un problema de habilidad, pero también descubrí que no soy el único que desprecia a esos perros, ya que muchos otros jugadores también tienen la misma queja. Por suerte, encontré un mod que prácticamente desactiva a los perritos. Pero eso no evitó que el juego se desinstalara varias veces.

Así que pensé en hacer esta publicación para plantear una pregunta sencilla. ¿Cuándo fue la última vez que te enfureciste? ¿Qué te hizo hervir la sangre? O quizás seas el caso aparte, el único jugador del mundo que nunca se ha enfurecido con un juego. Porque, seamos claros, enfurecerse es parte de la cultura gamer, ¡y siempre lo será!