La magia de la música universal que nos hace vibrar al unísono

in Cervantes3 years ago

En general, la cultura y el arte representan el sentimiento colectivo de una sociedad, expresan su manera de ver el mundo. Sin embargo, existen genios del arte que trascienden esas fronteras y por eso su arte es universal, y eso ocurre especialmente con la música.

Coloquialmente se dice que la música de Bach, Mozart, y Chopin es universal, porque enamora a personas de todo el mundo. Aunque técnicamente también se suele decir que es "música pura", es decir, sin connotaciones narrativas, discursivas, o emotivas, propias de una manera de ver el mundo de manera colectiva. Son creadores individuales que conectan con "todo el colectivo", no sólo una parte. Por eso son universales.

Un genio como Chopin, por ejemplo, convirtió un forma musical local (la polonesa), circunscrita a un territorio muy determinado e interpretada únicamente por músicos locales, en un estilo universal.

Dependiendo de "lo universal" de la composición será más interpretable por un mayor número de personas en todo el mundo. En sentido inverso, cuanto más local sea una composición menos interpretable será por alguien "de fuera".

Visto así, tenemos que la música de Beethoven no es tan universal como las composiciones de Chopin y aún menos la de Wagner, que es música “demasiado alemana”.

El blues, por ejemplo, era el lamento de un pueblo esclavizado, una forma musical muy circunscrita a un colectivo determinado y a su manera de ver el mundo.

Luego ese estilo se extendió a personas fuera de ese colectivo, pero que mediante esa música expresaban un sentimiento de "rebeldía juvenil" ante las rígidas estrecheces sociales de la época, es decir, permitía canalizar un sentimiento “de opresión”.

Y en la actualidad el blues se ha convertido en un estilo musical interpretado en los cinco continentes, por personas de todas las edades y condición, que ofrece la posibilidad de expresar un sentimiento profundo que puede ser de tristeza o pesadumbre o melancolía. Expresarlo lo alivia.

¿Hace falta ser un pianista polaco para interpretar bien una polonesa de Chopin?

¿Hace falta ser un guitarrista negro americano para tocar bien un blues?

Así es la magia de la música cuando pertenece a toda la humanidad. Emerge en un lugar y se extiende por todas partes porque conecta con cualquier individuo, uniéndonos a todos en el mismo sentimiento expresado a través de la música, tejiendo hilos invisibles que nos conectan a unos con otros por todo el planeta.