La atención psicopedagógica generalmente tiene su principal propósito alrededor del ámbito académico, colocando el énfasis en los procesos de aprendizaje, donde la rehabilitación de las competencias de lectura, escritura y matemáticas son fundamentales.

El objetivo de este servicio es brindar apoyo psicopedagógico a los alumnos que han sido diagnosticados con déficit atencional, para potenciar los procesos de aprendizaje orientados a la autorregulación y el funcionamiento efectivo en las distintas situaciones académicas, en el marco del trabajo individual.
¿Qué es la Atención Psicopedagógica?

Este enfoque es muy popular, y digamos que me parece válido, toda vez que cuando se habla de procesos para aprender, supone una serie de competencias de corte cognitivo que van a dotar a la persona de facultades de orden superior para comprender y compartir el mundo que le rodea.

Sin embargo, la psicopedagogía como ciencia es mucho más amplia y subordina la acción pedagógica dentro y fuera de lo que reconocemos como condiciones especiales del desarrollo, e inclusive fuera del espacio escolar. Valentín Martínez-Otero Pérez lo expone en forma brillante, sin objetar límites ni transgredir paradigmas acerca de esta disciplina. A continuación algunas de sus ideas, que fungen como prpopuestas centrales sobre u visión sobre la psicopedagogía su ejercicio.

La psicopedagogía no se circunscribe al marco escolar.
La psicopedagogía no ha de identificarse con la mera intervención o simple aplicación de teorías procedentes de otras disciplinas.
No en vano, estos profesionales están al servicio del desarrollo personal (individual y social) de los educandos. En general, su trabajo consiste en analizar, programar y mejorar los procesos de formación, en la triple vertiente cognitiva, afectiva y conductual.
Rumbos y desafíos en Psicopedagogía de la
Creatividad

Desde esta visión cosmogónica e inclusiva, el ejercicio de la psicopedagogía se desplaza más allá de los muros conceptuales que se han querido construir alrededor de su ejercicio. Generalmente, cuando los niños no pueden avanzar adecuadamente en la escuela se busca el servicio; sin embargo, cuando existen problemas de competencias de interacción social, desregulación emocional, impulsividad, comunicación e incluso, limitaciones de orden ejecutivo, generalmente no se incluye el servicio de psicopedagogía como parte de la solución.

Quizás esto se deba a una clasificación epistémica de orden colectivo, que a través de los años ha ganado terreno y se ha anquilosado en la pretensión de que los psicopedagogos enseñan a leer, a escribir y resolver las operaciones básicas de matemáticas. Nada más alejado de la realidad, porque las profesiones se abren a nuevas conquistas, desde sus formulaciones primarias.

Cuando hablamos de aprendizaje, sustantivo central dentro de la atención psicopedagógica, como lo refiere Martínez-Otero, estamos señalando un eje del desarrollo del ser humano, que debe desacoplarse de la escuela y de los contenidos escolares, para abrir un compás de apoyo hacia las competencias de orden social, efectivo y comunicacional.

El aprendizaje ha sido uno de los procesos más estudiados por ciencias como la Psicología y la Didáctica. Ello tiene una causa justificada, ya que las diversas teorías que han explicado el aprendizaje lo conceptualizan como una transformación en el sujeto, por lo que implica evolución en el desarrollo del individuo.
Aprendizaje y comprensión. Una mirada desde las humanidades.

Entiendo que quizás este anclaje se deba a que la psicopedagogía, como profesión, cuando daba sus primeros pasos en la década de los años 50, se ejercía desde clínicas psicopedagógicas donde se atendía la población infantil, en edad, escolar, con dificultades en el desarrollo, cuyo principal objetico era que requerían adaptaciones y apoyo especializado con el fin de mejorar el aprendizaje.

Sin embargo, en la actualidad, esta visón se ha transformado con la evolución natural del conocimiento y las contribuciones en forma de teorías comprobables, volcadas hacia la práctica psicopedagógica.

Los cambios son progresivos y habrá que esperar algunos años para la psicopedagogía retome su lugar dentro de las ciencias del aprendizaje y del progreso que ha tenido en referencia a su radio, diversidad y profundidad de acción.

Soy Sandra Cabrera, licenciada en Dificultades para el Aprendizaje, con estudios en Educación Especial Integral, Planificación Educativa y Literatura Infantil. Si te interesan los temas sobre educación especial, la discapacidad y las condiciones especiales del desarrollo, puedes contactarme a través de los números 04128032993 y 0412 8333334 y en:
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Las fotografías fueron tomadas con mi teléfono Redmi11 y editadas en el programa PowerPoint.
La traducción fue realizada con Google.

Psychopedagogical care generally has its main purpose around the academic field, placing emphasis on learning processes, where the rehabilitation of reading, writing and mathematics skills are fundamental.

The objective of this service is to provide psychopedagogical support to students who have been diagnosed with attention deficit, to enhance learning processes oriented towards self-regulation and effective functioning in different academic situations, within the framework of individual work.
What is Psychopedagogical Attention?

This approach is very popular, and let's say that it seems valid to me, since when we talk about learning processes, it supposes a series of cognitive competencies that will provide the person with higher-order faculties to understand and share the world around them.

However, psychopedagogy as a science is much broader and subordinates pedagogical action within and outside of what we recognize as special conditions of development, and even outside the school space. Valentín Martínez-Otero Pérez explains it brilliantly, without objecting to limits or transgressing paradigms about this discipline. Below are some of his ideas, which serve as central proposals on his vision of psychopedagogy and its practice.

Psychopedagogy is not limited to the school framework.
Psychopedagogy should not be identified with mere intervention or simple application of theories from other disciplines.
Not in vain, these professionals are at the service of the personal development (individual and social) of the students. In general, their work consists of analyzing, programming and improving the training processes, in the triple cognitive, affective and behavioral aspect.
Directions and challenges in Psychopedagogy of Creativity

From this cosmogonic and inclusive vision, the practice of psychopedagogy moves beyond the conceptual walls that have been wanted to build around its exercise. Generally, when children cannot advance adequately in school, the service is sought; However, when there are problems with social interaction skills, emotional deregulation, impulsiveness, communication and even executive limitations, psychopedagogy services are generally not included as part of the solution.

Perhaps this is due to an epistemic classification of a collective order, which over the years has gained ground and has become stuck in the claim that psychopedagogues teach how to read, write and solve basic math operations. Nothing could be further from the truth, because professions are opening up to new conquests, from their primary formulations.

When we talk about learning, a central noun within psychopedagogical care, as Martínez-Otero refers to it, we are pointing out an axis of human development, which must be decoupled from school and school content, to open a compass of support towards social, effective and communicative competencies.

Learning has been one of the most studied processes by sciences such as Psychology and Didactics. This has a justified cause, since the various theories that have explained learning conceptualize it as a transformation in the subject, which implies evolution in the development of the individual.
Learning and understanding. A look from the humanities.

I understand that perhaps this anchoring is due to the fact that psychopedagogy, as a profession, when it took its first steps in the 1950s, was practiced from psychopedagogical clinics where the child population, of school age, with developmental difficulties, was attended to, whose main objective was that they required adaptations and specialized support in order to improve learning.

However, today, this vision has been transformed with the natural evolution of knowledge and contributions in the form of verifiable theories, turned towards psychopedagogical practice.

The changes are progressive and we will have to wait a few years for psychopedagogy to regain its place within the sciences of learning and the progress it has had in reference to its radius, diversity and depth of action.

I am Sandra Cabrera, a graduate in Learning Difficulties, with studies in Comprehensive Special Education, Educational Planning and Children's Literature. If you are interested in topics related to special education, disability and special developmental conditions, you can contact me at 04128032993 and 0412 8333334 and at:
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