Dependencia afectiva: ¿a quién recurrir?

Cuando te das cuenta de que usted está sufriendo de la dependencia emocional y su vida personal y emocional se convierte en un caos, que desea convertir a alguien que puede ayudar a romper la dependencia emocional, sanar y reconstruir a vivir una relación sana y equilibrada. Varias posibilidades están disponibles para usted y aquí te mostrare algunas.

!!Para llamar a un psicoterapeuta!!

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Cuando la necesidad del otro es tan poderosa que nunca puede saciarse, se vuelve destructiva y las relaciones con los demás nunca son satisfactorias, estamos bajo la influencia de la dependencia emocional. La falta de afecto crea frustración, causada por una brecha entre las expectativas del adicto emocional y lo que recibe a cambio, según sus múltiples solicitudes. El adicto emocional entra en un ciclo adictivo del cual es difícil salir.

Los psicoterapeutas consideran la dependencia emocional como un movimiento circular hacia adentro que genera una sensación de falta. Este último necesita constantemente estar satisfecho y es por eso que los dependientes emocionales constantemente buscan atención y consideración del otro. Una falta que nunca está completamente llena y que se convierte en un pozo sin fondo. El papel del psicoterapeuta es detener este movimiento circular para restaurar una base sólida sobre la cual el paciente pueda encontrar un nuevo comienzo. Es para el terapeuta hacer que el paciente sepa que él o ella existe como persona por derecho propio y para ayudarlo a recuperar su propio valor.

Una de las herramientas del psicoterapeuta es la Terapia Conductual y Cognitiva (TCC) de la dependencia emocional. Esta es encontrar una forma de autonomía de la necesidad del otro trabajo sobre el autocontrol, en su impulso socio-emocional, las emociones, el comportamiento y pensamientos. Esta terapia se enfoca en las creencias, a menudo falsas, que llevan al individuo a ser emocionalmente dependiente y hacerle sufrir. Esta terapia se basa en una relación activa entre el terapeuta y el paciente para aprender nuevas conductas.

Otra terapia implementada para curar la dependencia emocional es la terapia interpersonal (IPT). Se distingue de los demás al centrarse en las interacciones y las modalidades relacionales, más que en las cogniciones erróneas o disfuncionales. Lo dirige un terapeuta interpersonal: un profesional de la salud, un psiquiatra o un psicólogo.

Llamar a un entrenador especializado

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Superar la dependencia emocional a través de un entrenador se trata de cómo puede superar la adicción y salir de ella al recuperar el control. El coach enfoca su trabajo en el presente y el futuro, mientras utiliza el pasado para comprender e identificar el origen del mal. El entrenador utiliza sus habilidades y experiencia para iluminar al adicto emocional, trabajando en elementos concretos como la autoestima, la autoimagen, el manejo de las emociones, la comunicación interpersonal, etc.

Un técnico especialista en dependencia emocional ayuda a desarrollar soluciones para deshacerse de una vez por todas los elementos que crean dependencia de otra tan baja autoestima, hipersensibilidad emocional, una dolorosa amantes del pasado , ansiedad significativa, etc.

Un coach personal se centrará en los objetivos que se deben alcanzar, en soluciones concretas, en la gestión del desarrollo personal. También hay muy buenos entrenamientos para curar la dependencia emocional.

hipnosis

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El objetivo de la hipnosis es superar la dependencia emocional, vista por el profesional como una forma de adicción. No es raro ver a las personas recurrir a un terapeuta diciendo "Estoy obsesionado con mi ex", por ejemplo. La hipnosis le permite a uno buscar profundamente dentro del cerebro, al nivel del subconsciente, la fuente del malestar para aniquilarlo.

El número de sesiones de hipnosis para curar la dependencia emocional varía de acuerdo con el grado de adicción y su forma. Durante la primera sesión, se invita al paciente a explicar su problema y a presentar lo que le gustaría cambiar en su vida. La hipnosis propiamente hablando, generalmente comienza en la segunda sesión. El terapeuta trabaja para liberar al adicto emocional, lo ayuda a tomar conciencia del trauma que ha sufrido y luego borra la emoción del trauma.

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