(Foto tomada desde mi celular Likuid Play)
Algunas personas de este mundo tienen un don único de poder tocar los corazones a través del habla, es un regalo que Dios otorga con el fín de ser un rayo de esperanza para todo el que necesite en cualquier momento una palabra de aliento, consuelo o motivación.
Es un arte, pararse delante de un público. El cual te mira y espera de tí todo, enfocados siempre en que muchas de sus preguntas existenciales serán respondidas por tí, es un compromiso grande quienes tienen la dicha de ser un canal de motivacion para muchas personas.
Auditorio Ambrosio Oropeza - UCLA Barquisimeto - Venezuela
(Foto tomada desde mi celular likiud Play)
No se imaginan la sensación que da cuando comienzas tu locución, y todos se rien, en otros momentos son cautivados, la voz se proyecta y penetra lo más profundo pudiendo llegar a los sitios más escondido de cada persona, siendo para muchos un balsamo sanador de cualquier molestia mental y transformando todo en una página nueva.
Hoy en dia se necesita de personas que reproduzcan buenos mensajes desde los micrófonos y que vayan directo a los corazones, ya que con la voz se da vida o se da muerte, por supuesto se debe apostar por dar vida, no se sabe si eso que estas dudoso en decir le sirva de mucho a alguien entre el público que esta deseoso de escuchar, las palabras sanan el alma, motivan, levantan el ánimo, con ella se enamora, algunos la utilizan para el canto (fusión de la música y la voz) arma perfecta para encontrar la paz.
El mundo va a cambiar cuando se use la voz adecuadamente, las familias van a ser cada dia mejor a medida que papá y mamá construyan y fortalezcan más a sus hijos con buenas palabras, la vida personal de cada individuo sera más feliz a medida de que existan palabras positivas hacia sí mismo, la voz tiene poder, la voz transciende
Texto: Arturo Adames