Depresión: conceptos y definiciones

La tristeza es una emoción presente en todos los seres humanos, así como lo pueden ser el miedo y la alegría, la ira y un sinfín de emociones. Todos tenemos derecho a sentirnos «depre» en algún momento y por algunos días, incluso. El problema radica cuando esa tristeza está presente diaria o interdiaria durante dos semanas o más, en ese caso, y sumando otros síntomas, se puede llegar a determinar si hay un trastorno depresivo. Y de acuerdo con los niveles de intensidad se diagnostica si es leve, moderada o severa.

El término "depresión" deriva del latín depressus, que significa abatido o derribado. La Real Academia Española lo define como un «síndrome caracterizado por una tristeza profunda e inhibición de las funciones psíquicas presentes en la persona afectada».

Cuando colocas la palabra «depresión» en el buscador de Google te aparecerá el siguiente concepto:

«Enfermedad o trastorno mental que se caracteriza por una profunda tristeza, decaimiento anímico, baja autoestima, pérdida de interés por todo y disminución de las funciones psíquicas».

Esta definición es bastante completa, a pesar de su sencillez, ya que, en pocas palabras, resume todo lo que implica estar deprimido, porque como dijimos al principio, no es estar “depre” o tener una tristeza pasajera; la depresión es más que eso y uno de los aspectos a destacar del concepto que Google te arroja, es que usa la palabra “enfermedad”, y eso es lo que es la verdadera depresión, una enfermedad, un trastorno bastante serio.

Como se acaba de mencionar la depresión es una enfermedad, y más frecuente de lo que se cree. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en todo el mundo se calcula que afecta a más de 350 millones de personas. Y también agrega la página de este organismo lo que mencionamos al comienzo de este post, que

«La depresión es distinta de las variaciones habituales del estado de ánimo y de las respuestas emocionales breves a los problemas de la vida cotidiana».

Y es que, una cosa es estar triste por la pérdida de un ser querido, una mascota, una relación amorosa o por haber perdido un empleo, otra muy distinta es que de manera diaria o interdiaria por dos semanas o más estemos tristes y padeciendo la mayoría o todos los síntomas que acompañan a una tristeza profunda.

Otro concepto o definición de depresión que encontramos en el portal de la OMS es el siguiente:

«La depresión es un trastorno mental frecuente, que se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración».

La depresión puede llegar a hacerse crónica o recurrente, y dificultar sensiblemente el desempeño en el trabajo o la escuela y la capacidad para afrontar la vida diaria. En su forma más grave, puede conducir al suicidio. Si es leve, se puede tratar sin necesidad de medicamentos, pero cuando tiene carácter moderado o grave se pueden necesitar medicamentos y psicoterapia profesional.

La depresión es mucho más grave que un pequeño ataque de desesperación; es una enfermedad emocional devastadora que reduce en gran medida la capacidad de funcionar con normalidad. El doctor Andrew Slaby lo explica así:

«Imagínese el dolor físico más intenso que haya sufrido en su vida, la rotura de un hueso, un problema odontológico o un parto, multiplíquelo por diez y réstele la causa; tal vez pueda hacerse una idea aproximada del sufrimiento que ocasiona la depresión».

Por último, otro concepto que podemos mencionar es que la depresión se presenta como un conjunto de síntomas de predominio afectivo (tristeza patológica, apatía, anhedonia, desesperanza, decaimiento, irritabilidad, sensación subjetiva de malestar e impotencia frente a las exigencias de la vida) aunque, en mayor o menor grado, también están presentes síntomas de tipo cognitivo, de voluntad y somático, por lo que podría hablarse de una afectación global psíquica y física, haciendo especial énfasis en la esfera afectiva.

Esta última definición resalta algo muy importante y con ello podemos concluir este artículo, la depresión es una tristeza, sí, de eso no hay duda, pero es una tristeza patológica, es decir enfermiza, que tiene causas, síntomas y evolución como toda enfermedad y como tal debe ser tratada. Este blog ofrecerá en subsecuentes artículos informativos de los diferentes tipos de tratamiento para la depresión.

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La depresión es prevenible, tratable y superable, confiamos en esa premisa. Si te sientes identificado con algunos de las definiciones o síntomas de la depresión lo más recomendable es que busques ayuda profesional para que te sea tratada. La depresión arruina tu calidad de tu vida incluso puede llevarte a considerar acabar con ella. Mientras te proponemos un sistema con 7 áreas vitales para combatirla. Más que un sistema es un estilo de vida.

•A poyo: nunca te olvides de darlo con diligencia y de recibirlo con gratitud.

•N aturaleza: ten contacto cada día con agua, luz del sol y aire puro, y mantén, dentro de tus posibilidades, una nutrición sana y balanceada.

•T ratamiento: en caso de estar diagnosticada(o) con depresión clínica, disfruta las ventajas de la psicoterapia y la pertinencia del tratamiento psiquiátrico.

•I nteligencia emocional y cognitiva. Fundamental para regular y gestionar nuestras emociones y pensamientos.

•D iversión y humor: nunca, pero nunca dejes de reír, entretenerte y divertirte. La risa y el buen humor son medicinales y beneficiosos para todo.

•E jercicio: estiramientos, baile, calistenia, fitness. Lo que sea, pero ejercítate. Es vital para tu cuerpo y emociones.

•P az, descanso, relajación: haz yoga, respiraciones, meditación, oraciones, descanso, masajes. Busca el equilibrio mental y físico, eso reduce el estrés y la ansiedad.

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La vida es hermosa, no pierdas la esperanza. Vívela a plenitud. Cada día es una nueva oportunidad.

Un abrazo antidepresivo y motivador.