"Alimentando" a un modelo de Inteligencia Artificial 🤖 [Spa][Eng]

Desde hace unos meses ha sido casi imposible no toparse a diario con alguna noticia, comentario o referencia dirigida a los accesibles modelos de inteligencia artificial que se han popularizado entre el consumidor web.

Ha sido para muchos una sorpresa el resultado que estas herramientas generan, más aun cuando la forma en que se les solicita la información deseada es tan simple y accesible. Generar algún texto informativo o imágenes artificiales con resultados certeros parece sumamente sorprendente para quienes no seguían este tipo de tecnología, incluso hasta el puto de escandalizase, demonizándola o sobreestimándola. No sé realmente qué es peor.

En nuestra blockchain se ha comenzado a utilizar esta herramienta como soporte para la creación de contenido y se ha generado cierta polémica al respecto. Yo en lo particular no la he utilizado pues no siento que aporte valor a mi blog, aunque me parece un soporte interesante para los artistas, siempre y cuando se utilice de manera responsable. Es una tecnología programable y por tanto detectable, ya he visto por ahí algún comentario de los Hive Watchers reportando situaciones irregulares.

Pero más allá de abrir un debate al respecto, quiero compartir una experiencia que llegó a mí de forma muy aleatoria y conveniente. En ciertas ocasiones uno se presta a participar en estudios que buscan precisar ciertas temáticas, cuando te involucras en el ámbito universitario esto pasa mucho, pero pocas veces resulta tan placentero.

Inteligencia artificial y croquetas es la llamativa propuesta con la cual la ingeniera >> Manuela Delgado << y el popular Bar Entalto han hecho un llamamiento para divulgar tecnología a través de la gastronomía y proponer un experimento que permita entrenar alguna carencia de cierto modelo basado en inteligencia artificial.

Concretamente ellas, porque es un proyecto creado entre mujeres, han querido estudiar qué sucedería si se intentara proporcionar a los prototipos de Chat GPT y Dall-E, información relacionada con las sensaciones que tenemos al comer, para así evaluar si la inteligencia artificial es capaz de ofrecer una respuesta natural cuando solicitamos evocar algún recuerdo del paladar. Al menos eso creo yo que es lo que les interesa después de haber asistido a la charla.

Since a few months ago it has been almost impossible not to come across a daily news item, comment or reference to the accessible artificial intelligence models that have become popular among the web consumer.

It has been a surprise for many the results that these tools generate, even more so when the way in which the desired information is requested is so simple and accessible. Generating some informative text or artificial images with accurate results seems extremely surprising for those who did not follow this type of technology, even to the point of being scandalized, demonizing or overestimating it. I don't really know which is worse.

In our blockchain, this tool has started to be used as a support for content creation and there has been some controversy about it. I in particular haven't used it because I don't feel that it adds any value to my blog, although it seems to me an interesting support for artists, as long as it is used responsibly. It is a programmable technology and therefore detectable, I have already seen some comments from Hive Watchers reporting irregular situations.

But beyond opening a debate about it, I want to share an experience that came to me in a very random and convenient way. On certain occasions one lends oneself to participate in studies that seek to clarify certain topics, when you get involved in the university environment this happens a lot, but rarely is it so pleasurable.

Artificial intelligence and croquettes is the striking proposal with which the engineer >> Manuela Delgado << and the popular Bar Entalto have made a call to disseminate technology through gastronomy and propose an experiment to train some deficiency of a certain model based on artificial intelligence.

Specifically, they (hands up for a project led by women) wanted to study what would happen if we tried to provide the prototypes of Chat GPT and Dall-E, information related to the sensations we have when we eat, in order to determine whether artificial intelligence is able to provide a natural response when we ask to evoke a memory of the palate. At least that's what I think they are interested in after having attended the conference.

Tras apuntarse por correo electrónico en una lista de asistencia, que en menos de 24 horas tuvo que cerrarse por alta demanda, te citaban en el Bar Entalto que estaría habilitado únicamente para el evento durante esa noche, la duración sería de una hora y media aunque al final terminó un poco antes.

La publicidad del evento proponía reunirse para disfrutar de la experiencia de comer croquetas de forma gratuita e intentar entrenar así a los modelos en cuestión, respetando nuestra confidencialidad. Demasiado tentativo para dejarlo pasar.

El evento se realizó un martes, por lo que la zona de fiesta en donde se localiza el bar estaba mucho más tranquila de lo habitual, aunque al acercarse al local se veía desde la distancia lo abarrotado que ya estaba mientras esperaban a que comenzara la actividad.

Estos primeros meses del año han sido helados, por lo que resultaba agradable estar dentro del caldeado local a pesar de la cantidad de personas que asistieron al experimento.

A la hora en punto decidieron esperar unos 10 minutos antes de empezar porque aun faltaban algunos asistentes, así que conseguí una silla disponible en la barra que me permitía permanecer allí, sin molestar mucho al resto de asistentes.

Mientas aguardaba me fijé que la pizarra, en la que anuncian sus famosos sabores de croquetas, indicaba que disponían de una nueva propuesta, lo cual me pareció interesante y me lo apunté para pedirla al final, en caso de que no estuviese incluida en la degustación de la actividad.

Al momento de comenzar la charla, ambas estancias del bar estaban repletas y solicitaron colaboración de los asistentes, manteniendo el silencio, para que la información lograra llegar a todos, pues no disponían de micrófono o altavoz.

Fue una charla muy amena, en la que la ingeniera responsable del estudio comenzó introduciéndonos un poco a su mundo de la divulgación de la tecnología y nos explicó de dónde surgió esa idea tan peculiar.

Al mantener una relación de amistad con la responsable del bar y ser ambas fanáticas de la diversidad, estaban un día entre copas y croquetas hablando de inteligencia artificial cuando se preguntaron qué sucedería si le consultaban a estos modelos lo qué se sentía al comer croquetas, cuestión que no generó ningún resultado interesante para ellas y por eso decidieron aventurarse en el experimento.

Chat-GPT les decía que no contaba con las capacidades para expresar esas sensaciones y Dall-E les generaba imágenes poco placenteras de personas con cierto sobrepeso comiendo una croqueta. Nada muy aproximado al placer que ellas esperaban ver reflejado.

Así que nos propusieron, a los asistentes, colaborar en una ingesta literal de datos para entrenar el modelo y comprobar si era posible obtener una mejor aproximación al respecto de las sensaciones deseadas. Las variables a tener en cuenta iban a ser las seis emociones básicas, que yo sinceramente no tenía una idea clara de a cuáles exactamente se referían.

Una vez aclarada la finalidad del asunto y dispuestos todos a colaborar con el estudio, la dueña del bar nos explicó la forma de proceder para realizar la degustación que nos permitiría obtener los datos necesarios. Nos iban a proporcionar a cada asistente una de sus bien conocidas cajas negras, que incluían una croqueta de cada sabor del que disponían en el bar y nosotros teníamos que indicar, por medio de un cuestionario anónimo, qué sentíamos al probar cada una.

After signing up by email on an attendance list, which in less than 24 hours had to be closed due to high demand, we were summoned to the Bar Entalto that would be enabled only for the event during that night, the duration would be an hour and a half although in the end it finished a little earlier.

The advertising of the event proposed to meet to enjoy the experience of eating croquettes for free and try to train the models concerned, while maintaining our confidentiality. Too tempting to pass up.

The event was held on a Tuesday, so the party area where the bar is located was much quieter than usual, although as you approached the venue you could see from a distance how crowded it already was as they waited for the activity to begin.

These first months of the year have been freezing, so it was pleasant to be inside the warm place despite the number of people attending the experiment.

At the appointed time they decided to wait about 10 extra minutes because there were still some attendees missing, so I got an available chair at the bar that allowed me to stay there without disturbing too much the rest of the attendees.

While I was waiting I noticed that the blackboard, where they advertise their famous croquette flavors, indicated that they had a new croquette flavor which I found interesting and I wrote it down to ask for it at the end in case it was not included in the tasting of the activity.

By the time the talk started, both rooms of the bar were full and they asked for the collaboration of the attendees, maintaining silence, so that the information could reach everyone because they did not have a microphone or speaker.

It was a very pleasant talk, in which the engineer responsible for the study began by introducing us to her world of technology dissemination and explained where this peculiar idea came from.

Having a friendly relationship with the bar manager and being both diversity fanatics, being one day between drinks and croquettes talking about artificial intelligence, they wondered what would happen if they asked these models what it felt like to eat croquettes, a question that did not generate any interesting result for them and decided to venture into the experiment.

Chat-GPT told them that it did not have the capacity to express those sensations and Dall-E generated unpleasant images of overweight people eating a kibble. Nothing very close to the pleasure they expected to see reflected.

So they proposed to the attendees to collaborate in a literal survey of data to train the model and check if it was possible to obtain a better approximation of the desired feelings. The variables to be taken into account were going to be the six basic emotions, which I honestly had no idea what exactly they referred to.

Once the purpose of the matter had been clarified and everyone was willing to collaborate with the study, the owner of the bar explained to us how to proceed with the tasting that would allow us to provide the necessary data. They were going to provide each attendee with one of their well-known "black boxes" that included a croquette of each flavor available in the bar and we had to indicate by means of an anonymous questionnaire what we felt when we tasted each one.

Nos aclararon el tema de las emociones básicas que se encontraban listadas para cada croqueta en el cuestionario, al que accedimos a través de un QR que nos pasaban a cada uno para escanear con el teléfono móvil

El cuestionario comenzaba preguntando tu rango de edad y posteriormente, una pregunta muy curiosa, consultaba si habías vivido durante tu infancia en una ciudad o en un pueblo, a partir de aquí listaba cada croqueta con 6 ítems para los cuales podías elegir solo uno.

Me gustó que nos explicaran que ninguna de esas emociones eran negativas, aunque pensaramos eso de alguna, la oradora dijo “No son negativas a menos que te ancles en alguna de ellas. Todas son necesarias.”

Las opciones eran siempre las mismas: tristeza, ira, asco, miedo, alegría y sorpresa. Me pareció un poco extraño poder asociarlas todas a la acción de comer una croqueta y no fui la única, porque pude escuchar a varios asistentes sorprenderse ante las opciones disponibles.

Pero claro esto depende de muchas cosas, en mi caso comer croquetas suele ser algo placentero porque me gustan y no tengo ningún recuerdo traumático asociado a ellas. Tampoco tenía experiencias negativas a lo largo de mi vida asociadas a alguno de los sabores de los que disponíamos, así que imagino que más o menos en eso se basan las respuestas en general, además que un modelo de inteligencia artificial podrá diferencias solo entre cosas muy concretas.

Por supuesto no voy a detallar mis respuestas, pero sí decir que variaban siempre entre la alegría y la sorpresa, dependiendo estas de si había probado o no alguna de ellas.

Esta no es una reseña gastronómica, pero no puedo dejar pasar un comentario positivo en cuanto al potente sabor de cada croqueta y a las agradables texturas que se percibían correctamente. Una croqueta hecha como debe ser.

Algo que me gustó mucho descubrir es que la caja negra incluía el nuevo sabor disponible, la croqueta de borraja con setas que estaba muy buena y tenía trozos perceptibles de los elementos que la componen, algo que me gusta mucho.

They explained to us the basic emotions that were listed for each croquette in the questionnaire that we accessed through a QR that they gave us to scan with our cell phone.

The questionnaire began by asking your age range and then, a very curious question, asked if you had lived during your childhood in a city or in a small town, from here it listed each croquette with 6 items for which you could choose only one.

I liked that they explained to us that none of these emotions were negative, even if we thought that about any of them, the speaker said "They are not negative unless you get caught up in any of them. They are all necessary."

The options were always the same: sadness, anger, disgust, fear, joy and surprise. I found it a bit strange to be able to associate all of them to the action of eating a kibble and I was not the only one, because I could hear several attendees surprised by the available options.

However, this depends on many things, in my experience eating croquettes is usually something pleasant because I like them and I don't have any traumatic memory associated with them. Nor did I have negative experiences throughout my life associated with any of the flavors available, so I imagine that this is more or less the basis for the answers in general, plus an artificial intelligence model will be able to differentiate only between very specific things.

Of course I am not going to detail my answers, but I will say that they always varied between joy and surprise, depending on whether or not I had tried any of them.

This is not a gastronomic review, but I cannot pass up a positive comment regarding the intense flavor of each croquette and the pleasant textures that were correctly perceived. A croquette done the way it should be.

Something I was very pleased to discover is that the black box included the new flavor available, the borage croquette with mushrooms which was very good and had discernible chunks of the elements that make it up, something I really like.

Una cosa que fue muy graciosa es que yo estaba muy concentrada en mi degustación, al principio me comí casi la mitad de la caja sin pensar en hacer alguna foto y sobre todo, no me fijé en que debajo las croquetas estaban identificados, cada una en su posición, el sabor de ellas.

Yo jugué a descubrir cuál era cada una y por suerte acerté luego de comprobar que no se correspondían con el orden que estaba en la tapa al abrirla. Fue una forma mas entretenida de probarlas todas y tuve la suerte de no arruinar el experimento por responder sin seguridad. Ni tan mal el paladar para comer croquetas.

Como consumición adicional pedí una cerveza Ambar, la cerveza zaragozana por excelencia y que bien fría acompaña de lujo a las croquetas, ya sé que me quejo de la temperatura del ambiente pero es que esto junto queda muy bien.

El evento finalizó tras la cata y habiendo acordado previamente reunirnos un mes después en el mismo local para evaluar los resultados del experimento. No se concretó una fecha pero estoy esperando que nos informen los detalles para intentar apartar ese día, me preocupa que estaré ausente algunos días del final de mes y me gustaría comprobar el resultado.

Espero poder comentar posteriormente si el trabajo de estas mujeres investigadoras ha logrado el propósito de otorgarle, en cierta manera, emociones a la inteligencia artificial y cómo esto nos puede afectar.

One thing that was very funny is that I was very focused on my tasting, at first I ate almost half of the box without thinking about taking a picture and above all I did not notice that under the croquettes were identified, each in its position, the flavor of them.

I guessed which one was each one and luckily I was right after checking that they didn't correspond with the order that was on the lid when I opened it. It was a more entertaining way to try them all and I was lucky not to ruin the experiment by answering unsure. Not too bad a palate for eating croquettes.

As an additional drink I ordered a beer Ambar, the beer from Zaragoza par excellence and that well chilled goes great with the croquettes, I know I complain about the temperature of the environment but this together is very good.

The event ended after the tasting and having previously agreed to meet a month later in the same place to evaluate the results of the experiment. No date was set but I am waiting to hear the details so I can try to set that date aside, I am concerned that I will be away for a few days at the end of the month and I would like to check the results.

I hope to be able to report later on whether the work of these women researchers has achieved the purpose of giving, in some way, emotions to artificial intelligence and how this may affect us.