Saludos a todos! Hoy me sumo a participar en el Encuentro de talentos con el tema del pensamiento a la acción donde les estaré contando cómo hago en mi vida diaria para materializar mis pensamientos.

Desde niña he sido muy organizada con mis deberes, sobre todo si estos deberes van a ser evaluados. En la escuela me esforzaba mucho para mantener un promedio que estuviese entre los primeros lugares y logré destacar en todos mis años academicos, con excepción del 7mo grado o que fue por la adaptación al nuevo ritmo de deberes y materias.

Cuando debía hacer una exposición, mi material de apoyo lo hacía yo misma. Láminas, maquetas, folletos, carteleras. Mis profesores estaban encantados con mi trabajo y me daban puntos extra por esto.

Luego fue la universidad. Planificaba las cosas antes de hacerlas y cuando lograba mi objetivo me sentía feliz y dichosa. Igualmente fue en mi desempeño como profesional. Me licencié y luego fui por el trabajo que quería. Siempre con una proyección y una meta trazada minuciosamente.

Un día, mientras trabajaba en mi oficina, era la administradora de una cadena de tiendas de ropa colombina, conocí a Osmel.

Un muchacho que frecuentaba la tienda, porque era amigo de los dueños, yo me limitaba a observarlo en los monitores de las cámaras de seguridad. Con los días se hizo costumbre mirarlo. Y me descubrí varias veces suspirando por el muchacho de la pantalla como si fuese un actor de novela rn la televisión.

Ideé un plan para conocerlo. Así que casualmente me daba por recorrer las tiendas y entregar información a la hora que llegaba Osmel. Era la excusa perfecta. Así supe que era cubano, que estaba en una misión médica y que era soltero y sin compromisos.

Esta casería duró unos meses. Me enteré que yo le gustaba a él y que cumplía años en esos días. Así que planifiqué cada detalle y me lancé.

Paso 1 conseguir su número de teléfono: parece fácil pero en medio de todo, aunque no me crean,soy tímida. No tuve el valor de pedirselo esa tarde, pero mandé al chico que atendía la caja en la tienda y él me consiguió el número.

Resulta que no tenían en donde anotar en ese momento así que el muchacho le dio la calculadora para que anotara los números. Cuando yo salí de la oficina copié los número en mi teléfono pero me dijeron mal el código, en Venezuela teníamos 3 compañias de teléfono y 2 de ellas iniciaban con 2 series numéricas diferentes.

Intenté varias veces pero no pude contactarlo. Recuerdo que me respondió alguien: me encantaría ser el afortunado al que le estás escribiendo, pero debo decirte que te equivocaste de número.

Seguí probando números hasta que lo encontré.

Paso 2 invitarlo a salir: Quién dijo que las mujeres no podemos invitar al chico ideal a salir a almorzar? Yo lo hice. Le dije que lo invitaba a almorzar para celebrar su cumpleaños y él por supuesto que aceptó.

La pasamos genial. No quería que el tiempo corriera. Y desde ese entonces, have 9 años estamos juntos.

Luego vino el plan, recuerdo que una de nuestras salidas comenzamos a preguntarnos si tendríamos hijos? Y la respuesta de ambos fue que definitivamente unos 2. Lo bueno de este hombre es que sus gustos e ideas son muy parecidas a las mías, así que es fácil ponernos de acuerdo. Coincidimos que llamaríamos a nuestros hijos combinando los nombres de sus padres y de los míos. Y así quedó María Teresa en primera opción. Siempre pensé que tendría una niña, incluso lo soñaba.

Nos casamos por en civil en Camagüey-Cuba. Y saliendo del registro planificamos juntos casarnos por la iglesia. Después de todas las dificultades que pasamos, despues de 3 años de ese matrimonio civil nos casamos en la iglesia de Céspedes.

Fue una boda maravillosa. Je contado otras veces que me sentí como una princesa. Mi vestido blanco, el carruaje que me llevó a la iglesia, la decoración. Todo fue perfecto. 2 meses después de la boda, como era mi plan, quedé embarazada y tenemos a nuestra María Teresa de 2 años y medio.

Todo en la vida, cada paso, cada minutos podemos planearlo. Muchas veces las cosas no van a salir como las planeaste pero por lo menos tienes una idea de que camino seguir para lograr alcanzar tu felicidad. Yo soy partidaria de que en la vida necesitamos un plan y luego debemos buscar la forma de materializarlo. Es cuando pasamos del pensamiento a la accion.